Bajo el glorioso cielo de Escocia hace 35 minutos ha comenzado el Festival. Y en el Royal Mile ya hay actores que venden su espectaculo. Todos pueden actuar en el Fringe pero una vez aqui hay que vender entradas y los grupos compiten con otros dos mil, todos buenos. Asi que hay una lucha tremenda para acaparrar la atencion del publico y hacer funcionar el crucial boca a boca. Es decir el actor debe hacer una doble performance y mas le vale ser bueno en ambas. Pelos de punta. Ya he ido al Box Office a recolectar el primer punado de entradas. No puedo evitar recordar lo completamente diferente y peor que era mi vida, cuando vine la ultima vez en esta parte del mundo. Y eso que entonces me encantaba el whisky de malta y ahora me hace muchisimo dano....
El Fringe concide con el festival de jazz, de cine, de libros, con el festival de Edimburgo clasico y con el Tattoo, una exhibicion mitica de musica militar en la Explanade en frente del Castillo cuyas entradas se ha agotado hace 3 meses. Me lo voy a comer todo a manos llenas. Mi casa esta a 10 minutos de aqui, una preciosa propiedad donde vive una pareja muy interesante, los Goodwin, abuelos en perfecta forma y llenos de vida, que aceptan huespedes en la esperanza de conocer a gente interesante, y que tienen dos perros muy mayores, sordo ciegos pero esplendidos como ciertos ancianos poetas. Life is wonderful.
viernes, 7 de agosto de 2009
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